Arantxa Arcos
Coatepec, Ver.- El sabor salado, jugoso con limón y mezclado con dulce como mango o melón es degustado por comensales que conviven en el bosque de niebla ubicado en Briones, en la carretera antigua de Coatepec a Xalapa.
La variedad de estos platillos se fusionaron entre un amplio terreno adecuado en un bosque, sin edificar grandes construcciones o alterar el ecosistema. Solo uno cuenta con una fogata que pasado el atardecer aumenta su flama para reunir a clientes interesados en carnes asadas y vino al estilo romántico.
Metros adelante, un local te transportará en segundos al estado de Oaxaca. Mezcal, chapulines o tlayudas son elaboradas al momento por un par de cocineras que también laboran en el centro del Pueblo Mágico de Coatepec.
Un corte cocido tres cuartos o término medio iniciará su cocción mientras corres por el amplio parque que cuenta con una tirolesa, una gran pelota donde menores de edad pueden rodar, pintar o planear técnicas de fútbol americano.
La pasta de tu elección con un toque de Italia es otra opción concurrida por los visitantes que ocupan mesas a dos metros de distancia, con cubreboca y que diluyen gel anti bacterial frecuentemente entre sus dedos.
La diversidad de platillos te permitirá elegir más de dos a degustar y compartir con tus amigos o familiares. En “Malanga”, por ejemplo, te darán la bienvenida con este fruto seco en presentación con queso, picante o natural, al estilo papa frita pero sin una gota de grasa.
Las bebidas varían desde naranjada natural, limonada, cerveza artesanal o comercial, y copas de licor como ron, whisky, tequila, entre otros.
En días calurosos te gustará consumir ceviche con mango, melón, cebolla morada, tomate y piña cocidos en un jugo de limón que saciará la sed causada por el aumento de temperatura en el ambiente.
Los pequeños trozos del pescado de tu elección irán a juego con frutas y verduras. Tostadas o más malanga te servirán de tenedores si decides consumirlos lentamente.
De postres encontrarás helados, paletas o crepas con helado en cada local o en particular con “La Donería”. Una gran dona te señalará el sitio donde cremosos helados de cacahuate o rojos ardientes de fresa se derretirán en tu boca mientras admiras el atardecer en un columpio al final del recinto situado a media hora de Coatepec o 15 minutos de Xalapa.
Los únicos ruidos que ambientarán el lugar serán aves, el vaivén de las copas de los árboles o niños descendiendo de la tirolesa de aproximadamente diez metros de largo.
